Hoy todas las canciones me hablaban de vos, de tu risa y de tu boca. Como me gusta cuando me mirás, me hacés sentir tan mujer. Yo me veo tan viva a tu lado. Cuando estamos juntos, el perfume de tu piel entra por mi pecho y se queda en mí todo el día.
Tengo tantas ganas de enseñarte todo lo que sé, aquello que aprendí de los tropiezos, de los viajes, de la universidad, de mi familia, en fin, de la vida. Son mis ganas locas de besarte las que aún no puedo controlar. Tienes que enseñarme a ponerles un freno.
Amarte a la distancia es todo un desafío. Crecer y madurar junto a vos en esta locura que es el amor, es tan emocionante. No me importa si nos caemos, porque sé que juntos nos vamos a volver a levantar. Estoy tan segura de que nuestros caminos se cruzaron por algo. Nada fue casualidad en ese baile enharinado esa tarde que te ví.
Quiero saber si estás dispuesto a volar porque es lo único que sé hacer. Porque mi imaginación no para un segundo y necesita un acompañante. Quiero saber si tu amor tiene límites porque el mío siempre está al borde de los precipicios.
No me pidas que pare, que detenga mi andar. Estoy dispuesta a dejar huellas en tu historia. Tengo el deseo de plasmar mi cariño, no solo en tu cuerpo, sino también en tus sueños. Que de eso se trata el amor, de soñar todos los días con la felicidad.
Y si la felicidad está en los frutos, no dudaré en cultivar con vos las mejores cosechas. Para eso te voy a pedir que riegues todos los días estas palabras. Que cuides incesantemente mi vuelo. Yo lo haré contigo.
Te amo. Pero no te amo mundanamente, te amo como ama el mago a su magia o la luna al sol, aunque no lo pueda ver. Te amo con esa brisa de destellos que tienen las estrellas. No sé qué será de mí en unas horas o en unos años. Hoy estoy acá para decirte todas estas rarezas que me pasan. Todo esto que vuela conmigo mientras viajo en colectivo o me encuentro trabajando. No me preguntes por qué, sólo sé que me enamoré.

No hay comentarios:
Publicar un comentario